Esta frase estaba escrita en uno de esos postes rectangulares que hay repartidos por la ciudad (en este caso en la Plaza de San Francisco), y que no sé exactamente para que sirven, además de para meadero de perros o para soporte de carteles y frases de poetas callejeros. Supongo que tendrán algo que ver con la electricidad o la telefonía, pero ni pajolera idea. La frase decía así: «No soy artista, soy un kuadro».